ANALFABETISMO FUNCIONAL EN ESTUDIANTES DE LIMA Raúl González Moreyra, Rosario Quesada Murillo
Se ha explorado la comprensión lectora en dos grupos de estudiantes secundarios y universitarios, con un total de 103 personas, para conocer sus niveles de analfabetismo funciona¡. Se aplicó la técnica del cloze a lecturas básicas y complementarías de dominio alfabético, Las lecturas básicas correspondieron a textos de alfabetización informacional (en prosa), documentaria y numérica (cálculo). Además se amplio la exploración a textos complementarios: literarios, científicos (divulgación) y humorísticas (ensayo). Los promedios de los estudiantes secundarios están por debajo del nivel crítico implicando analfabetismo funcional. Los estudiantes universitarios superan en promedio por 1 punto vigesimal el límite crítico en lo que respecta a los textos básicos, pero están por debajo de ese límite en cuanto a los textos complementarios. El principal instrumento de trabajo académico es el lenguaje escrito y los estudiantes testados exhiben un decepcionante nivel de rendimiento lector, lo que explica además los bajos rendimientos académicos secundarios y universitarios en el país. Palabras claves: Comprensión lectora, técnica cloze,
analfabetismo funcional. We explored the reading comprenhension in 103 students from high schools and universities to know their levels of functional illiteracy. We applied the cloze technique basic readings and complementaries of alphabetic predominance. To basic reading belong to informational alphabetical books (in phrase), documentarial and numerical. Besides, we extend the exploration complementary books: literary, scientific (divulgation) and humoristic (proves). The averages of high school students go beyond in average only per 1 vigesimal point the critic limit all about the basic books, but they were under this limit with respect to the complementary books. The principal academic work instrument was the writing language and the students showed one dissapointing level of reading development, what could explain, furthermore, the low academic gettings in national high schools and universities Key words: Reading comprenhention, cloze technique,
functional illiteracy. El analfabetismo funcional se define como la dificultad del sujeto alfabetizado para procesar fluidamente y comprender la lengua escrita (Londoño, 1991). El analfabeto funcional latinoamericano es un trabajador niño, joven o adulto alfabetizado en el que concurren además otras limitaciones: carencias socioeconómicas, políticas y culturales; perteneciendo a estratos pobres y marginales de la población; carencias educativas por escolaridad escasa, irregular o inadecuada; precaria formación cultura¡ básica con serias dificultades en la comprensión numérica y pocas habilidades en el cálculo. Esta condición lo limita extremadamente para afrontar con esperanza de éxito las demandas de la modernización, el entorno cultural contemporáneo de carácter científico- tecnológico y la posibilidad de monitorear y conducir los cambios necesarios para modificar sus condiciones de vida. El analfabetismo funcional presenta problemas lectores en el nivel de la comprensión más que en el de la decodificación (González, 1996). La decodificación es un problema de desciframiento y de conocer la correspondencia fonemicografémica. La comprensión exige un procesamiento que va de lo literal a lo inferencial: la comprensión inferencial requiere la activación de ricos conocimientos del mundo y de un tipo de lectura de carácter más predicativo que visual. Es plausible que la dificultad del analfabeto funcional sea en el nivel de la comprensión inferencial. El analfabetismo real, el del sujeto carente de escolaridad y que nunca fue expuesto a la alfabetización temprana es más bien un problema de decodificación, de desconocimiento de la correlación fonémica- grafémica, y de las coordinaciones y complejas correspondencias entre los códigos oral y escrito. En el Perú en el período comprendido entre 1991 y 1993, fecha del último censo poblacional, la tasa total de analfabetismo real ha bajado del 18,1% de la población de más de 15 años al 12,8% (INEI, 1994), la tasa última en la que la participación de la mujer es mucho más alta que la del hombre: 18,3% de mujeres son analfabetas frente al 7,1 % de hombres. No tenemos cifras nacionales de analfabetismo funcional. En Estados Unidos (Barton y Kirsh, 1990) desarrollaron una amplia investigación del analfabetismo funcional sobre una muestra representativa de adultos jóvenes de ese país. Exploraron tres áreas de lectura: a) alfabetización en prosa: lectura y comprensión de textos como artículos de prensa, b) alfabetización numérica: capacidad de efectuar operaciones numéricas simples a partir de información contenida en textos impresos como el menú de un restaurante, e) alfabetización documental: identificación y aprovechamiento de la información contenida en formularios, cuadros, gráficos e índices. Se consideró que estos tres tipos de alfabetización son de imprescindible aplicación en las condiciones de vida urbana moderna. Los resultados no fueron muy halagadores. Sólo el 27% de las personas exploradas superó el nivel de 325 puntos sobre un máximo de 500 de calificación, equivalente en nuestro sistema escolar de evaluación a 13; en alfabetización numérica sólo el 30% superó este nivel, en alfabetización documental sólo el 11% logró más de 350 puntos, equivalente a un 14 vigesimal. Las personas que no habrían terminado secundaria tuvieron resultados peores. Se considera que estos resultados son inaceptables, decepcionantes e insuficientes para estar a la altura de la complejidad de la sociedad moderna. La sociedad actual y del futuro necesita trabajadores muy competentes con capacidad para autoinstruirse y hacer frente adecuadamente a los inevitables cambios tecnológicos. En nuestro país, si bien tenemos estadísticas que nos permiten
conocer el estado del analfabetismo real, este no es el caso cuando se trata de
analfabetismo funcional. Como una forma de aproximación a este complejo problema hemos
tratado de explorar la comprensión lectora en estudiantes de los dos últimos años de
secundaria y en los universitarios, en ambos casos de la población de Lima. Metodología: Sujetos Se seleccionó una muestra intencional de alumnos de los colegios de
Lima, estatales y privados de clase media y de universidades también locales, estatales y
privadas. Fueron 103 sujetos correspondiendo 58 a universidades y 45 a
estudiantes del último año de secundaria. Los estudiantes universitarios fueron
preferentemente de los tres primeros anos de estudio. Instrumentos Se elaboraron o seleccionaron según el caso, seis pequeños textos de 120
palabras promedio. Los textos pertenecían a dos clases: textos básicos relacionados
con los rubros examinados por Barton y Kirsh (1990): alfabetización en prosa a la que
rotulamos texto informativo, alfabetización documental a la que denominamos texto
documentario y a la alfabetización numérica que es el texto numérico. Los textos se
hallan en el anexo de este informe. Se completó este juego de tres textos con los que
hemos llamado textos complementarios, también en número de tres que son respectivamente:
texto literario, científico (divulgación) y humorístico (ensayo). En el anexo los
textos figuran con el número del orden con el que los hemos presentado. Procedimientos Se aplicó en una sola sesión colectiva por grupos no mayores de 25 alumnos. Los alumnos de secundaria fueron cubiertos con dos sesiones de aplicación y los universitarios en tres sesiones. Se les daba la instrucción de llenar cuidadosamente cada línea vacía del texto con una sola palabra que a su función completará adecuadamente el sentido de la expresión. Si creían haberse equivocado al llenar una palabra podían borrarla tantas veces como quisieran. Las cantidades debían ser consideradas como una sola palabra. Por ejemplo, el año actual 1994, era para los efectos de la lectura una palabra. No debían hacerse preguntas al instructor ni comentarios entre los alumnos. El tiempo de la prueba era de ocho minutos para cada lectura: 3 minutos la leían completa y 5 minutos para completarla. El tiempo total era de 48 minutos. La técnica de calificación es de 1 punto por cada palabra
correctamente identificada. Los puntajes 9, 10 y 11 se consideran críticos; el puntaje de
8 o menos implica falta de comprensión, lo que consideraríamos analfabetismo funcional;
un puntaje de 12 o más se considera con comprensión lectora, o sea una persona
adecuadamente alfabeta. Resultados En la tabla N.º 3 presentamos los resultados comparativos de los promedios de las puntuaciones de cada lectura de los grupos secundarios y universitarios contrastados por la prueba «t». Todas las diferencias son consistentemente significativas a favor del grupo universitario. Si analizamos cada lectura encontramos un rendimiento aceptable en el grupo universitario de la lectura de textos informativos y documentarios; comprensión deficiente en textos numéricos, científicos y humanísticos, todos ellos por debajo del nivel crítico. Es decir habrá analfabetismo funcional parcial en los textos claves numérico y científico para responder a las demandas deja revolución tecnológica- científica de los años actuales. El grupo secundario presenta con comprensión sólo la lectura documentaria y luego ninguna otra lectura alcanza el nivel de alfabetización adecuada. En la tabla N.º 1 presentamos los puntajes promedio de toda la población. Ninguna lectura tiene un nivel aceptable. La tabla N.º 2 presenta los puntajes diferenciales por tipo de texto y grupo poblacional. Solo el grupo universitario presenta nivel de comprensión en textos básicos, el mismo grupo está por debajo del nivel crítico en textos complementarios. El grupo secundario tiene un rendimiento deficiente en textos básicos, pero no alcanza ni el 25% de la puntuación posible en los textos complementarios. Para obtener la validez de los instrumentos se ha calculado la correlación de todas las pruebas entre sí. Las correlaciones son significativas a la p. de 0,01, se presentan en la tabla N'4. En la tabla N.º 5 se presentan los resultados del análisis discriminativo para determinar tanto los textos que cumplen una función diferencial más alta como el porcentaje de agrupamiento correcto. Los textos son de alto poder diferenciador, siendo los de más alto poder discriminativo los siguientes: texto humanístico con una Lambda de 0,54; documentario 0,47, inforrnativo 0,45 y científico 0,43. El agrupamiento de casos adecuadamente clasificados comporta un 86,41% que implica un alto nivel de superación entre rendimientos.
TABLA N.º 1 Puntuaciones promedio obtenidas con la población total
TABLA N.º 2 Puntuaciones promedio de textos básicos y complementarios por niveles secundarios y universitario
TABLA N.º 3 Prueba «t» de puntuaciones promedio de los grupos universitario y secundario en cada tipo de texto
TABLA N.º 4 Coeficientes de correlación (1) entre los diversos textos
TABLA N.º 5 Función Lambda para Análisis Discriminativo.
Discusión Nuestros resultados apuntan a marcar que los instrumentos empleados son relativamente adecuados para su propósito: examinar la comprensión lectora de los estudiantes en tareas que son indispensables para su «trabajo», es decir, su desempeño académico. Los rendimientos de ambos grupos juntos nos proporcionan un nivel aceptable de lectura. Todos los textos están en el nivel crítico o por debajo de él. Si se separan los grupos secundarios y universitario, éste presenta resultados aceptables sólo en textos informativos y documentarios; en los otros cuatro textos están en el nivel crítico o por debajo de él. En resumen, parece que nuestra escolaridad fracasa en general en lectores eficientes, que puedan usar autoinstruccionalmente sus habilidades lectoras. Hay presencia de analfabetismo funciona¡ en jóvenes cuya principal labor es leer.
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