dc.description.abstract | El autor del artículo señala algunas de las implicaciones más importantes del pensamiento de Peirce para la filosofía de la educación. Concretamente, se centra en el cultivo deliberado de la atención fenomenológica, la imaginación metodológica (o heurística), el realismo experiencial, el falibilismo penitente, y la amplia erudición como implicaciones que se siguen de los textos escritos por Peirce. De modo especial, y en relación con la atención fenomenológica, desarrolla la noción de mundo, pero desde una perspectiva distintivamente pragmática en un mundo que resulta profundamente ambiguo. A continuación, y siguiendo con esta comprensión del mundo, el autor defiende la reconstrucción (o reconceptualización) pragmatista de la experiencia humana. Mientras la perspectiva que suele asumirse entiende que la experiencia es inherente e inevitablemente subjetiva, la perspectiva reconstruida (o la pragmatista) entiende que la experiencia consiste en un encuentro directo, aunque mediado, con la realidad. El pensamiento de Peirce avanza en la dirección de reconocer, en lo tocante a la educación, la necesidad de reactivar el mundo y de reconstruir la experiencia. Pero nos lleva también ver la importancia de un falibilismo resuelto, una imaginación heurística, y un aprendizaje de amplias miras. | es_ES |