dc.description.abstract | En los últimos 20 años, los países de América Latina y el Caribe han dado pasos muy importantes para garantizar el efectivo ejercicio del derecho a la educación. En particular, en este periodo la cobertura de la educación preescolar en toda la región aumentó de 36% a 61%; casi el total de los niños asiste a educación primaria; y la cobertura del nivel secundario aumentó de 69% a 80%. Sin embargo, siguen existiendo retos significativos que demandan la construcción de más espacios escolares, como la necesidad de universalizar el acceso a educación preescolar y secundaria y de acomodar la expansión de la jornada escolar (actualmente, muchas escuelas se utilizan en dobles o triples turnos). Asimismo, no toda la capacidad instalada responde adecuadamente a las necesidades pedagógicas actuales; y existe infraestructura que no cumple con normas mínimas estructurales o de accesibilidad, o está en estado precario de mantenimiento. Bajo este contexto, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) lanzó en 2011 el proyecto “Aprendizaje en las Escuelas del Siglo XXI” (AESXXI), una cooperación técnica entre países de América Latina y el Caribe enfocada a analizar la situación y los desafíos de la infraestructura escolar en la región así como a proponer soluciones y avanzar en la creación de estándares de construcción sub-regionales. El presente estudio, ejecutado como parte de la segunda fase de dicha cooperación, tiene el objetivo de diagnosticar y comparar los procesos de gestión de infraestructura escolar de los diferentes países de la región, para facilitar la identificación de retos comunes, así como la detección de áreas de mejora puntuales de parte de cada país y de mejores prácticas que podrían ser replicadas en otras partes de la región. El estudio se basó principalmente en revisión de información pública y en la realización de entrevistas a profundidad con los responsables de los procesos de gestión de infraestructura escolar pública de 12 países de América Latina y el Caribe, que participan actualmente en la cooperación técnica liderada por el BID. Como resultado final, ofrece una visión detallada de los procesos aplicados en cada país así como una contraposición de los mismos. Es importante destacar que la comparación que se efectúa entre los procesos aplicados por diferentes
países no pretende ni puede ser utilizada para clasificarlos entre “mejores” y “peores”: las importantes diferencias entre los 12 países analizados en cuanto a tamaño, población y condiciones sociales, económicas y ambientales resultan en necesidades y prioridades diferentes, que requieren diferentes tipos de soluciones. Sin embargo, se espera que este estudio comparativo resalte hallazgos e ideas relevantes que puedan ser desarrolladas para facilitar la mejora de las condiciones de la infraestructura escolar en diferentes países de la región. | es_ES |