Metas del milenio y la brecha étnica en el Perú
Abstract
Analiza la conexión entre la aplicación de la agenda y los avances en las
metas del milenio y la problemática de la exclusión que sufre la población de origen
indígena en el Perú. Se plantea que son tres los problemas principales en relación al tema de los ODM en el Perú. En primer lugar, la escasa difusión pública de los ODM, tanto a nivel gubernamental como de la sociedad civil y opinión pública, y especialmente de las relacionadas a la educación. En segundo lugar, el atraso de la agenda planteada por los ODM en relación a la agenda de los sectores de salud y educación. Mientras los ODM se centran principalmente en temas de cobertura educativa, la agenda local está más relacionada con temas de la calidad de la educación. En el caso de salud, los ODM omiten temas cruciales de salud reproductiva que son priorizados en la agenda de las entidades gubernamentales y de la sociedad civil. En tercer lugar, ni los ODM, ni la agenda local, contemplan los problemas de exclusión asociados a la pobreza de grupos tradicionalmente marginados en la sociedad peruana, en particular, de los grupos étnicos. El análisis empírico desarrollado muestra que los avances estimados en los indicadores básicos de los ODM no tuvieron una evolución distinta para la población con lengua nativa, quechua o aymara, por lo que es poco lo logrado en términos de la reducción en la brecha étnica. Por ejemplo, el avance en la meta de pobreza extrema es de aproximadamente 40% tanto a nivel nacional como para los grupos de lengua nativa. Sin embargo, la tasa de pobreza extrema de estos últimos se mantiene al doble del promedio nacional. Más aún, cuando se analizan indicadores más cercanos a las agendas locales, la brecha es aún mayor. Finalmente, la vulnerabilidad de las poblaciones indígenas a shocks económicos es un tema ignorado por los ODM y es otro aspecto que caracteriza la problemática de las poblaciones indígenas en el Perú, localizadas fundamentalmente en áreas rurales. Esta evolución refuerza la idea que la agenda de los ODM no es suficiente para abordar adecuadamente el problema de exclusión que sufre la población de habla nativa, siendo necesario el desarrollo
e implementación de políticas específicas que ataquen los mecanismos que reproducen la situación de marginación que sufre este grupo poblacional.