Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad
Abstract
El objetivo del Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad (PNIC) es proveer al Estado peruano de un insumo para construir una agenda de desarrollo transparente y consensuada que permita cerrar brechas claves para el desarrollo económico y social del país. De hecho, el plan sigue una lógica sectorial y territorial que tiene impacto en el corto plazo, pero está guiado por una estrategia de largo plazo para contribuir a mejorar la productividad y la competitividad que devienen en mejores condiciones de desarrollo para el país. Para este objetivo, el Gobierno peruano ha recibido el soporte especializado del Gobierno británico y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que le permitirá identificar las mejores prácticas internacionales en temas de planeamiento y priorización. Al mismo tiempo, contrastarlas y contextualizarlas para el caso peruano, con los retos que esto implica. Este documento tiene tres grandes secciones. En la primera, se estima una brecha de acceso básico de infraestructura de cerca a 363 mil millones de soles. Es importante resaltar, sin embargo, que este cálculo no incorpora elementos de calidad como la calidad del agua, la cantidad de horas de electricidad, infraestructura natural o el estado de las estructuras de los colegios. Es decir, cerca a 363 mil millones de soles es una cifra subestimada si el objetivo es parecernos a los países más desarrollados. En la segunda, se desarrolla una metodología de priorización, para identificar proyectos de infraestructura de alto impacto en la productividad y competitividad, que benefician a la mayor cantidad de población (sobre todo, la más vulnerable) y que se articulan entre sí para potenciar los impactos de cada iniciativa creando oportunidades para todas las regiones del Perú. Producto de esta metodología, el PNIC presenta una cartera de cincuenta
y dos proyectos con un valor de casi 100 mil millones de soles. Cabe resaltar que esta cartera se ha construido a base de los proyectos que cada sector ha identificado y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ha articulado estos esfuerzos. No obstante, es importante resaltar que los sectores siguen siendo responsables de ejecutar los demás proyectos de su cartera. En la tercera, se presenta una propuesta de mecanismo de institucionalización que permitirá, por un lado, seguir y garantizar la ejecución de los 52 proyectos priorizados y, por otro, mantener vigente la buena práctica de hacer un planeamiento en el largo plazo en función a los objetivos del Estado y en los distintos niveles de gobierno.