dc.description.abstract | Indica que El Perú enfrenta un doble desafío: incrementar el rendimiento promedio
de los estudiantes y, al mismo tiempo, reducir las desigualdades asociadas a variables sociodemográficas. Por ello, pide planificar sesiones pedagógicas más exigentes, a la par que se aumentan diferencialmente las oportunidades educativas de los niños y niñas pobres, rurales, indígenas o cuyas madres cuentan con escasa educación, con énfasis en los niños que exhiben varias o todas estas características. Asimismo, refiere que existe un triángulo perverso —o virtuoso, dependiendo de las características de la familia del estudiante— entre las características demográficas de los niños y niñas y de sus familias, las oportunidades educativas disponibles para ellos y los resultados educativos que obtienen con el tiempo. Cada uno de estos elementos tiende a reforzarse en el otro. | es_ES |