Estrategias para acelerar la contribución de los Programas de Alimentación Escolar a la Nutrición y Educación : evidencias y oportunidades
Abstract
Los menús diversos en la alimentación escolar pueden contribuir a disminuir la anemia. En particular, el caso de los programas que proporcionan carne. Mucho menos costoso: Fortificación de comidas o refrigerios con micronutrientes. Por ejemplo, una revisión de 10 estudios encontró que la alimentación escolar elevó las concentraciones séricas de hierro, yodo, vitamina A y vitamina B; en 8 casos también mejoró los niveles de la hemoglobina. Consumir las raciones en casa, también puede ayudar a resolver la anemia de otros miembros del hogar. La harina es el vehículo más común para la fortificación, asimismo el grano extruido de arroz y la leche. La sal puede ser fortificada con yodo (y hierro) y el aceite, con vitamina A. Los frijoles y el mijo biofortificado proporcionan hierro y maíz/mandioca biofortificada. El camote puede proporcionar Vitamina A.