Guía para sistematizar buenas prácticas
Abstract
Las instituciones formativas — los centros de educación técnico productiva y superior tecnológica y artística — son espacios privilegiados que tienen entre sus fines la generación de condiciones para crear conocimientos, la gestión de personas que contribuyan al desarrollo sostenible del país desde el emprendimiento, la investigación aplicada y el equilibrio entre la oferta formativa y la demanda laboral. Además, estas instituciones son responsables del desarrollo de competencias para la empleabilidad, como la versatilidad, la capacidad para adaptarse a nuevos desafíos, el saber cómo resolver situaciones problemáticas, la preparación para la incertidumbre, la aceptación de la diversidad cultural e identitaria, que son, entre otras, las nuevas habilidades que requerirán los y las profesionales del futuro, y en las que debemos centrar su formación en estos tiempos. La presente guía está dirigida a docentes, directivos, estudiantes y público en general, con la finalidad de poner a su alcance lineamientos básicos de lo que es una buena práctica, los criterios para su reconocimiento, así como su proceso de sistematización, útil para orientar nuevas iniciativas que aporten a la generación de cambios significativos en las instituciones formativas. De este modo, podrán responder a las demandas sociales, culturales, laborales y personales con un sentido de calidad y excelencia, y orientar su trabajo al desarrollo social y equitativo del país.