dc.description.abstract | Este tercer Informe bienal sobre la realidad universitaria en el Perú rinde cuenta de cinco ámbitos del sistema universitario del país, presentados en capítulos: 1. Instituciones: oferta y financiamiento, 2. Estudiantes: trayectorias, matrícula y derechos, 3. Docencia: condiciones, grados y desarrollo profesional, 4. Investigación: formación, investigadores y desempeño institucional y 5. Egresados: inserción laboral, condiciones de empleo y percepciones. El documento adopta un enfoque centrado en la calidad, equidad y diversidad en la educación universitaria, en el marco de la Ley General de Educación, la Ley Universitaria, la Política Nacional de Educación Superior y Técnico-Productiva, y el Proyecto Educativo Nacional al 2036. Asimismo, usa información de múltiples fuentes internas de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), y externas provenientes de organismos públicos y privados. El primer capítulo, Instituciones: oferta y financiamiento, presenta evidencia sobre el primer Licenciamiento institucional, la oferta universitaria peruana actual y la evolución reciente del financiamiento de las universidades y de los montos otorgados en becas y créditos educativos. Se muestra que el 96% de las entidades con licencia denegada fallaron en seis o siete condiciones de las siete exigidas a la oferta existente durante el Licenciamiento. En tanto, las instituciones licenciadas desistieron de 115 locales y de 3243 programas académicos que no reunían las condiciones básicas de calidad exigidas por la norma. Tras la culminación del procedimiento de Licenciamiento institucional, la renovada oferta universitaria estuvo compuesta por 92 universidades y dos escuelas de posgrado, 49% públicas, 31% privadas asociativas y 20% privadas societarias. Por su parte, la oferta académica, estuvo compuesta por un 44% de formaciones de bachillerato, 24% de segunda especialidad, 27% de maestría y 5% de doctorado. Asimismo, más de la mitad de las formaciones de pregrado se agruparon en tres familias de carreras: Ciencias administrativas y derecho, Ingeniería, industria y construcción, y Educación. Por otra parte, se evidenció una progresión constante de los ingresos reportados por las universidades privadas, pues estos se triplicaron en los últimos diez años. Esta tendencia fue particularmente marcada para las instituciones privadas societarias, que tuvieron, en conjunto, ingresos cercanos a los 3500 millones de soles, los más elevados en el último año del período analizado. El segundo capítulo, Estudiantes: trayectorias, matrícula y derechos, describe el acceso a la educación universitaria, la evolución reciente de la matrícula, la situación de los estudiantes ante la crisis sanitaria y la evolución de la interrupción de los estudios de pregrado. Se encuentra que la admisión al pregrado está directamente relacionada con el tipo de gestión de las instituciones, ya que, en promedio, las universidades públicas fueron seis veces más selectivas que las privadas. Asimismo,
tras culminar el colegio, el 29% de jóvenes peruanos tuvo acceso a la universidad; y, por otra parte, el 10% de adultos jóvenes accedió a estudios de posgrado. En comparación con la situación previa a la crisis sanitaria, la reducción del acceso fue significativa, especialmente en el acceso a este último nivel de estudios. En cuanto a la matrícula, esta se contrajo en pregrado en 15,7% y en posgrado en 27,7%, en un contexto de cambios en la oferta educativa y de crisis sanitaria en el país. Así, en el 2020, se reporta una matrícula de aproximadamente 1,3 millones de estudiantes en pregrado y 95 mil en posgrado. En el primer caso, estuvo principalmente concentrada en Lima y el resto de la costa (64%), así como en instituciones privadas (66%) y en formaciones vinculadas a Ingeniería, Administración y Derecho (55%). Con respecto a la situación de los estudiantes antes de la pandemia, se reveló que el 42% reportó no tener un seguro de salud, el 22% no contó con una conexión a internet en el hogar y el 20% no tenía una computadora en su hogar. Finalmente, se muestra que las mujeres de lengua materna nativa tuvieron tres veces más probabilidades de interrumpir sus estudios de pregrado en el 2020. Del mismo modo, los estudiantes hombres de nivel socioeconómico bajo tuvieron ocho veces más probabilidades de interrumpir sus estudios, en comparación con sus pares de otros grupos socioeconómicos.
El tercer capítulo, Docencia: condiciones, grados y desarrollo profesional, se ocupa de los puestos docentes existentes en el país a fin de describir las características de las planas docentes. Para ello, analiza sus particularidades en términos institucionales y demográficos, etapas en la carrera docente, condiciones para la docencia y características de los grados académicos de los profesores. En el año 2020, se registraron 63 601 puestos docentes, de los cuales aproximadamente el 80% provinieron de entidades con sede en cuatro departamentos: Lima, La Libertad, Cusco y Junín. Asimismo, se da cuenta de que solo un tercio de los puestos docentes fueron ocupados por mujeres, proporción que se reduce a 29% al examinar las planas docentes de las entidades públicas. Por otra parte, en el país, el 68% de puestos docentes no fueron ordinarios, proporción que alcanza un 94% en las instituciones privadas societarias. Durante el Licenciamiento institucional, la proporción de puestos docentes a tiempo completo pasó de 25% a 41%, y la presencia de profesores con posgrado creció de 55% a 78%. Por último, se indica que el 12% de los puestos fueron ocupados por docentes con posgrado en el extranjero. Sin embargo, las nuevas generaciones de docentes presentan perfiles más internacionales, en particular, con formaciones de posgrado en España, Estados Unidos y Brasil. En el cuarto capítulo, Investigación: formación, investigadores y desempeño institucional, se describe la situación de la formación doctoral en el país, la presencia de los docentes universitarios en el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica y en revistas indizadas en Web of Science y Scopus, las características de las publicaciones académicas, el registro de patentes universitarias en el Indecopi, y, finalmente, los rankings Histórico de instituciones universitarias (1980-2020) y Excelencia 2021. Se pone en evidencia que, en el país, el 70% de los doctorandos estaban matriculados en formaciones de Administración, Derecho y Educación; porcentaje que asciende al 94% al tratarse de la matrícula en las entidades privadas societarias. Del mismo modo, la mayor parte de formaciones de doctorado en el país no se vincula con investigación de alto impacto, ya que solo el 30% de las formaciones doctorales provino de instituciones con alto desempeño en investigación. Por otra parte, en los últimos dos años, se incrementó en 20% el número de docentes inscritos en el Registro Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Renacyt). En cuanto a las publicaciones especializadas, desde el inicio del Licenciamiento institucional, las casas de estudio peruanas están hoy más orientadas a la investigación, pues han cuadruplicado sus publicaciones científicas presentes en Web of Science entre los períodos 2013/2014 y 2019/2020. Esta progresión se caracterizó por el crecimiento de la producción científica fuera de Lima, así como en instituciones que no tenían un alto desempeño en investigación. Del mismo modo, desde el año de promulgación de la Ley universitaria, se ha observado un crecimiento exponencial de la innovación tecnológica, ya que el número de invenciones y modelos de utilidad universitarios incluidos en el registro nacional de patentes del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) pasó de 9 a 274. Esta progresión se caracterizó por un crecimiento de la innovación patentada en el interior del país, ya que la proporción de patentes provenientes de universidades con sede fuera de la región Lima pasó de 0% a 20% del total nacional. Por último, el Ranking histórico de instituciones universitarias (1980-2020) presenta una clasificación según nuevos criterios de desempeño científico, que incluyen por primera vez, el registro de patentes. Este revela que los diez primeros puestos incluyen a seis entidades públicas, dos universidades privadas asociativas y dos privadas societarias. Similarmente, de las entidades líderes en investigación, siete fueron de Lima, dos de la región andina y una de la región amazónica. El quinto capítulo, Egresados: inserción laboral, condiciones de empleo y percepciones, describe la población peruana con estudios universitarios completos, el proceso de inserción laboral de los bachilleres, las condiciones de empleo de los egresados y su percepción acerca de la democracia como régimen de gobierno. Se evidencia que, en el año 2020, aproximadamente uno de cada diez peruanos de entre 21 y 65 años tenía estudios universitarios completos. Según región se observa que Lima, con 15%, fue la región con mayor proporción de esta población; en contraste con la región amazónica, donde esta cifra no superó el 5,5%. Asimismo, se observa que Arequipa fue el departamento con mayor proporción de egresados (16,1%), mientras que San Martín el de menor proporción (4,2%). Por su parte, el análisis de la inserción laboral muestra que el 72% de los bachilleres encontró un empleo asalariado formal durante los 24 meses posteriores a su graduación. Del mismo modo, en el período estudiado, los bachilleres de Educación tardaron menos tiempo que sus pares de otros campos formativos. Estos tardaron, en promedio, 2,5 meses en conseguir su primer empleo en planilla; significativamente menos que para el promedio nacional que fue de 4,4 meses. En cuanto a las condiciones de empleo, se prueba un aumento del desempleo de los egresados jóvenes; y, por otra parte, una precarización de sus condiciones laborales. En efecto, el desempleo en egresados de 21 a 35 años pasó de 6,8% a 15,5% a nivel nacional; y, del mismo modo, la tasa de subempleo invisible pasó de 12,7% a 25,7%, al tiempo que sus ingresos se contrajeron en un 20%. Finalmente, el estudio de las percepciones sobre la democracia muestra que la mayor parte de egresados universitarios consideró que la libertad de expresión es su principal característica y el 82% que es siempre preferible; perspectivas significativamente diferentes que para la población sin educación superior. | es_ES |