dc.description.abstract | A pesar de que, en los últimos años, el sector educación ha empezado a atender algunos de los problemas específicos de la educación rural, la brecha en resultados de aprendizaje entre la población urbana y rural no disminuye, pues las mejoras en el medio urbano van a un ritmo más acelerado que en el rural. Entre las acciones seguidas en el ámbito rural, tenemos que se está implementando una educación bilingüe intercultural para la población cuya lengua materna es el quechua, el aimara o algunas de las lenguas amazónicas; también se ofrece acompañamiento especializado a un número creciente de docentes en escuelas rurales de primaria; y, finalmente, la atención en salud y la alimentación escolar son mejores. Estas acciones, aunque tienen efectos positivos, no permiten disminuir, en lo educativo, la brecha urbano-rural. El Consejo Nacional de Educación considera que es indispensable colocar en la primera línea de las prioridades educativas la definición e implementación de una estrategia nacional de educación de la infancia rural. Es impostergable realizar un esfuerzo extraordinario, articulado, diversificado, sostenido y que sea tres o cuatro veces mayor que el realizado en las áreas urbanas para lograr que la niñez rural reciba la educación que se merece. El Año del Bicentenario de la Independencia no debe encontrar a la infancia rural del país en una situación de injusticia, muy lejana de la promesa que la entonces nueva república ofrecía a los ciudadanos peruanos. Esta estrategia debe reconocer los problemas que hoy aquejan a la población rural, pero, sobre todo, debe asumir los importantes cambios que se están produciendo en los escenarios rurales del país. Estos pueden constituir una oportunidad para acelerar las mejoras que la educación rural requiere. Entre ellos, tenemos las siguientes: primero, la disminución del crecimiento de la población infantil ; segundo, la mejora y crecimiento de las vías de comunicación rural y los medios de comunicación, lo que ayuda a romper el aislamiento y dispersión característicos de la geografía nacional; tercero, la diversificación de los medios de manutención de la población rural mediante la combinación de una agricultura de subsistencia con otras actividades como el turismo, el transporte o una producción agropecuaria que puede colocarse hoy en el mercado con mayor facilidad. | es_ES |